lunes, 5 de abril de 2010

La leche, el primer alimento humano

Vía Láctea.
Peter Paul Rubens

La primera alimentación que el hombre recibe es, en efecto, la leche de la madre o de la nodriza. Desde el punto de vista fisiológico y médico de la antigüedad, está la descripción de Sorano de Efeso, “la nodriza perfecta debe tener entre 20 y 40 años y ser multípara. Será griega de nacimiento".
Galeno de Pérgamo, también coincide en la edad de la madre/nodriza y describe los pechos ideales para el amamantamiento.
Sin embargo el primer orador que hace referencia a las cualidades afectivas y morales de la madre/nodriza es Quintiliano en los años 60 a.C. aproximadamente. El afirma que: “Es preciso que la nodriza sea sensible y afectuosa a fin de que cumpla sin vacilaciones y sin murmullos los deberes a su cargo”
La templanza y la castidad de la nodriza pasaban además por abstenerse de relaciones sexuales y de borracheras.
Luego se hacía referencia a las características físicas de la leche (consistencia, olor, color y viscosidad).
Como vemos en la antigüedad, las cualidades morales y de afecto y las características físicas de la leche, eran de vital importancia para una nutrición ideal del niño.
Galeno ponía énfasis en la alimentación de la madre/nodriza: “la mujer que está amamantando debe poner atención en lo que come y bebe” y además en su comportamiento sexual: “supongo que la mujer que amamanta, se abstiene de toda relación sexual”

La leche en la mitología griega

En el relato mitológico, se habla de la leche de la inmortalidad, en el episodio de Hera la esposa de Zeus amamantando a su hijo “adoptivo” Heracles. Zeus, se enamora de Alcmena, esposa de Anfitrión y concibe un hijo, descendiente de Alceo, el padre de Anfitrión. Dejando de lado cuestiones de necesidad cosmogónica de este hijo por parte de Zeus, lo cierto es que, para ser inmortal, necesitaba de la leche de Hera, su madrastra. Ella, ofendida por la infidelidad de su marido se negaba a amamantar al bastardo, pero Hermes lo coloca en sus brazos cuando ella dormía y el niño tiró tan fuerte del pezón que la diosa encolerizada, derrama la leche en el universo dando origen a la Vía Láctea.
En 1985, en España, se funda la Organización Vía Láctea en apoyo de la lactancia materna.
La leche es el primer alimento porque es producto de la madre.
“Tienes vino dichoso privilegio” dicen los texto órficos para agregar:
“toro te precipitaste en la leche, raudo te precipitaste en la leche. Carnero, caíste en la leche. Cabrito, en la leche caí”.
Bernabé, citado por Villaroya, interpreta estos fragmentos como partes del ritual de despedida de los muertos, en los cuáles, la leche y el vino se usaban durante despedida Se vinculan a muerte y renacimiento. Quiere decir que el muerto al descender se convierte en lactante.
En las laminillas órficas la iconografía muestra a una mujer llevando un cabrito que va a beber de una crátera de Dionisos. Son epifanías del dios y el muerto que va a renacer, se identifica con él.
Hay también una simbología relacionada a los signos del zodíaco (Aries, Tauro Capricornio) y al viaje de las almas por la vía láctea que es blanca como la leche y ésta como luna que es primer muerto y el primer resucitado, es la crátera que recibe a las almas que luego viajan por la Vía Láctea, que es el inicio del camino de las almas.
En la edad de oro del hombre, no había mujeres, vivían bajo el signo de Dionisos, con la vid como planta central del paraíso. Gracias al prodigio dionisíaco, la leche, la miel y el vino brotaban de la fecunda tierra, dispensadora generosa de alimentos.
En la literatura, el seno materno muestra su importancia en la Ilíada como “el lugar donde se olvidan la preocupaciones” (el seno de Hécuba, que lo muestra a Héctor para alejarlo de una muerte segura a manos de Aquiles).
La leche de madre/nodriza es el primer alimento en el interesante camino del omnívoro.

A modo de conclusión puede decirse que la primera experiencia con el cuerpo materno, la participación mística entre la madre e hijo es la dicha, es la armonía con el cosmos; precisamente, armonizarse con el universo es la función básica de la mitología.
La lactancia materna, es un evento único y fascinante, tanto desde el logos como también desde el mythos.

Marcelo Ocampo


1. CAMPBELL, J. El héroe de las mil caras (Fondo de Cultura Económica)


2. DEL HOYO, J. La primera alimentación del hombre Universidad Autónoma de Madrid
http://revistas.ucm.es/ghi/02130181/articulos/GERI9191220195A.PDF.

3. HOMERO. Ilíada, Ediciones Terramar

4. LORAUX N. Las experiencias de Tiresias. Editorial Biblos.

5. MARTÍNEZ VILLARROYA, J. Estructuras Antropológicas del Imaginario Orfico. Universitat de Barcelona.

6. VÍA LÁCTEA http://www.vialactea.org/queesvialactea