Un viaje por la tarde de domingo, llena de colisiones neuronales al azar, alguien muere de un pixelazo cerebro vascular otro muere de rutina bajo el sol.
El karma fluye como destino inexorable, antes que la falacia antropomórfica, antes que Elohim, incluso antes que el universo.
Así la feria de máscaras de dioses de cotidianeidad, de familia y de garrapiñadas y de chorizan y de globos como estrellas atadas a un hilo.
¿Cuándo los caballos se van revelar del yugo circular?
Brahma viaja 13 años en un huevo cósmico y fabrica el mundo.
Dios no puede hacer llover, la serpiente está en el paraíso, Eva es seducida para fines cosmogónicos.
¿De Adán?, solo queda la nuez y una pretendida cicatriz (toracoplastia) de la cuál Dios hace de partero y la raza humana se separa de la divina. Digamos Dios se saca el quilombo de encima y lo manda a la Tierra un nivel “ontológico” de menos peligro para el orden Cósmico.
(Los exotéricos pretenden que el sexo es pecado)
Zeus hizo lo mismo con las ctonias diosas como Hera su esposa y Tetis, la ninfa que de haber engendrado un hijo con el supremo, sería tan poderoso que le cortaría los testículos y reinaría en lugar de él.
Pandora derrama los males por culpa de Epimeteo su marido, hermano de Prometeo, que engañó a Zeus tres veces.
Todo el instante está bajo tensión, las aguas del diluvio abrieron la puerta del caos al mundo. Un héroe debe construir otra puerta con la cabeza de un monstruo o con los troncos del árbol del Paraíso, que es el alter ego del monstruo, las aguas primordiales una vez que hicieron el diluvio siguen su curso y los demiurgos hidráulicos deben encauzarlas como Hércules al limpiar los establos llenos de mierda.
Caos y orden monstruos pre y post-cosmogónicos, monstruos que están por fuera del mundo acechando como Urano, Erinias y gigantes y monstruos que están en los confines como la Esfinge como el León de Nemea.
¿Y que mierda tiene que ver?
Que pisé mierda con mis zapatillas nuevas, otra vez, que los grandes monstruos están fuera del mundo como Videla, que han cambiado el nombre del paraíso terrenal por el paraíso del horror
Ni Dios ni el diablo quieren su alma.
Que los monstruos de los confines tienen garras de corrupción, a cara descubierta, piden coimas en los mostradores, una firma de un ministro cuesta guita un viaje de un DOCTOR, cuesta guita y el mundo se va diluyendo entre la codicia la corrupción, el saber y el poder, y quien sabe es quien gobierna.
La herencia occidental se desangra entre Edipo sin complejos y Edipo con complejos, esto es, uno que no sabía su destino y otro que sabía demasiado y no le importó matar al padre y acostarse con su madre y tener hijos hermanos.
Pero Edipo supo y se hizo cargo de su culpa trágica, se revienta los ojos para no ver la desgracia como acto de dignidad.
Hoy los corruptos ¿Se reventarían los ojos como Edipo el de los pies hinchados?
No, porque el acto terrible de vaciar las cuencas oculares, no hace a la persona adivina, ni chivo expiatorio solo digna de lástima y no de piedad.
Ahora,si lo hace frente a las cámaras de televisión, ahí sí, un espectáculo con rating asegurado. Pero en una sociedad sin creencias en máculas y chivos expiatorios como ritual, sería un acto circense sin más.
Marcelo
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